Ágora abordará manejo del mundo emocional de estudiantes de colegios seleccionados en Caracas y Miranda

La Asociación Civil Ágora, es una de las organizaciones que participa del Proyecto: Jóvenes y Escuelas como Agentes de Cambio por la Paz que auspicia la unión Europea; en ese orden, adelanta un conjunto de acciones orientadas a potenciar el liderazgo de servicio entre los beneficiarios del programa de Acción Afirmativa.

Humberto Luque M.

La participación en concreto y las acciones a ejecutar por esta organización, tal como señalaron sus representantes, están centradas en la segunda fase del proyecto que lidera la Asociación Civil Paz Activa. Las mismas se refieren a la Implementación del Programa de Acción Afirmativa con los jóvenes seleccionados, y el Programa Manejo del Mundo Emocional y prevención de violencia para jóvenes, basados en la metodología Ubuntu.

En ese sentido, explicaron que la implementación del programa de Acción Afirmativa con los jóvenes seleccionados, contempla el componente construcción de paz, y el emprendimiento social.

De igual forma, indicaron que está prevista la adaptación del programa Empatía y prevención de violencia al contexto de las 8 instituciones educativas participantes, y su posterior implementación, el cual está dirigido a toda la comunidad educativa de las instituciones beneficiarias del proyecto.

Público objetivo

Tal como indicaron las representantes de Ágora, en esta fase del proyecto aspiran trabajar con los 120 jóvenes seleccionados y con representantes de las 8 comunidades educativas involucradas.

“Se pretende contar con la participación en este  programa de empatía, con personal obrero, administrativo, docente y representantes. Incluso, está abierto a aquellas personas que hacen vida dentro de la comunidad  y tienen vínculos con la institución y los jóvenes seleccionados”, acotaron.

Con respecto a lo que consideran es lo más complejo a la hora de cumplir con los objetivos planteados en el marco de este proyecto, señalan que “tal vez sería lograr los objetivos en  medio de este contexto país. Sin embargo, tenemos una visión positiva que dirige esa complejidad hacia el éxito”, apunta María Luisa Campos.

El equipo de Ágora, dada su experiencia en el área, confía plenamente en las posibilidades que brinda la implementación de este tipo de programas en el desarrollo de habilidades y potencialidades de liderazgo. En ese orden, están convencidas desde su experiencia, que existen indicadores que les permiten evidenciar los cambios en la población de estudio.

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“Principalmente, son aquellos donde observamos que los  jóvenes se movilizan a realizar actividades, que no solo les brindan  beneficios a sí mismos, sino que los ayudan a modificar positivamente su entorno. Estos indicadores se basan en generar cambios positivos en sus comunidades basados en la motivación, la vocación de servicio, la humildad y la voluntad”, apuntan.

En ese sentido, destacan que los retos que se plantean están enfocados en “lograr impactar al mayor número de jóvenes a través de los diferentes programas que integran el proyecto, obteniendo así una disminución de la violencia social y aumentando la promoción de la cultura de paz en las comunidades participantes”.

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